¿Debo de revisar particularmente mi coche de segunda mano?

Cuando estás buscando comprar un vehículo de segunda mano, como Coches ford de ocasion en pontevedra, es posible que llegado un momento comiences a tener dudas. Descartar aquellos vehículos que menos te gusta es relativamente fácil, ya que tendrás que dejar a un lado tanto los que son demasiado viejos o están en muy malas condiciones ya en apariencia, como los que exceden tu presupuesto.

Entre los que tienen la apariencia correcta y además se adaptan a tu bolsillo, puedes descartar aquellos modelos que no cumplan tus expectativas, por ejemplo, coches demasiado pequeños cuando quieres un modelo familiar y con buen maletero.

Llegado este punto seguramente tengas ya muy pocos coches en tu lista de posibles adquisiciones, y es más que probable que alguno te haya llenado el ojo. Pide al vendedor que te deje probar los dos o tres coches que más te convenzan para que la comodidad a la hora de conducirlo y la seguridad que te inspiren te ayude a tomar una decisión.

Con un poco de suerte, la lista habrá quedado reducida a dos coches entre los que tienes que decidirte. Es el momento de pensaren la posibilidad de que un mecánico de tu confianza pueda revisar ambos vehículo para decirte en qué estado están y cuál deberías de comprar. Incluso si en tu lista solo hay un coche, también deberías de mirarlo para asegurarte de que has hecho la elección correcta.

Debes de hablar con el vendedor para que este acceda a que el mecánico revise los vehículos, algo que generalmente sucede sin problemas. De este modo, podrás tomar una decisión sabiendo exactamente lo que compras y teniendo la seguridad de que no te vas a llevar ninguna sorpresa desagradable al poco de salir del establecimiento con tu nuevo coche usado.

Los vehículos de segunda mano tienen garantía, un mínimo asegurado de seis meses, pero si compras un coche que te de problemas la garantía va a cubrir ciertas reparaciones, pero una vez que se acabe seguirás teniendo un coche con problemas o que no va a durar lo que esperabas que durase, por lo que no vas a amortizar su precio.

Cubrirse las espaldas es bastante fácil y siempre es preferible pagar al mecánico por esta revisión previa y no por los arreglos que tendrá que realizar a posteriori si no se toma una buena decisión.