¿Quieres que tu salón sea el más elegante? Te damos cuatro consejos para conseguirlo y disfrutar de un espacio digno de un diseñador de interiores.

– Los estores paqueto. Son el tipo de estor más elegante y resultan imprescindibles en un salón que quiere estar a la altura de las circunstancias y de las mayores exigencias. Los estores paqueto están elaborados en tejidos muy delicados, como sedas, que permiten que se arruguen con facilidad para conseguir la característica forma de este tipo de cortina. Normalmente, son complicados de montar y es necesario llevarlos a la lavandería para que queden impecables. Pero también pueden hacerse en lino, ahora que están de moda los tejidos naturales, lo que hace que resulten mucho más resistentes sin perder ni un ápice de su diseño elegante.

– Una lámpara de calidad. Las lámparas tienen una gran importancia como elementos de iluminación, pero no tienen menos importancia como elementos de la decoración. Una lámpara de calidad siempre va a vestir un salón y le va a dar una elegancia excepcional. Evita las lámparas baratas que a la larga acaban haciendo que cualquier diseño de interiorismo fracase e invierte en una lámpara elegante. Ahora están de moda las que forman circunferencias o las que siguen los dictados del Mid-Century. Puedes elegir cualquiera de estas tendencias o apostar por una lámpara muy clásica que jamás va a pasar de moda y que queda perfecta en los ambientes señoriales.

– Una alfombra de diseño. Si la lámpara viste el salón la alfombra no lo hace menos. Una alfombra de diseño, con materiales de calidad, bonita y elegante, será un elemento que hará que tu salón se vea mucho más distinguido y especial. Actualmente, están de moda las alfombras de pelo corto en tonos de gris, que juegan con las diferentes tonalidades para crear todo tipo de dibujos que hacen que cada alfombra sea única y muy especial.

– Un sofá Chester. Están de moda y lo cierto es que tienen muchos elementos a su favor. Son muy atractivos, llenan cualquier espacio, resultan cómodos para todos los días y visten muy bien el salón. Dan imagen de elegancia y de refinamiento y pueden combinarse con todo tipo de muebles, desde los que tienen un toque vintage, que son los que le van como anillo al dedo, hasta los más modernos con los que se crea un atractivo contraste.