El estor enrollable noche y dia es una de las tendencias más fuertes en decoración para dormitorios. Una de sus ventajas es que no es necesario levantar el estor para poder tener luz, lo que facilita la iluminación de la habitación sin que se pierda intimidad. Esto es algo muy importante para muchas personas a las que les encanta disfrutar de la luz natural pero que no quieren quedar expuestas a todas las miradas cuando su habitación da a una calle con edificios muy cercanos o a un patio de luces.

Pero, además, solo hay que mover la cadena del estor para que las franjas que lo recorren cambien de posición y la luz deje de entrar, proporcionando una oscuridad total y muy agradable para poder dormir toda la noche sin que nada moleste. Por tanto, el estor nos ahorra el tener que utilizar una persiana y también el tener que usar una cortina y un visillo en función de la claridad buscada.

Algunos de estos estores consiguen incluso combinar más franjas para lograr una posición intermedia entre el paso de luz y la oscuridad, para propiciar un buen ambiente para ver una película, por ejemplo, sin estar totalmente a oscuras, pero sin que la luz sea un problema para los molestos reflejos en la pantalla.

Inicialmente, estos estores se encontraban en tonos de blanco y negro, en grises o en marrones, pero actualmente ya no es así y podemos verlos en cualquiera de los tonos de moda, fabricándose en los colores que hacen furor cada temporada. Se garantiza así que siempre combinen perfectamente, pudiendo comprar el estor en el mismo tono principal que la colcha y consiguiendo así que la apariencia de la habitación sea mejor y esté perfectamente coordinada.

Al elegir un estor de calidad a un buen precio, se garantiza un buen funcionamiento y también se evita que la luz pueda traspasar un material de mala calidad haciendo que, en realidad, no estemos hablamos de oscuridad para poder dormir, sino tan solo de una ligera penumbra que a muchos no les resulta suficiente para poder conciliar ese sueño reparador que todos deseamos al final de una larga jornada. Para los más exigentes, el estor día y noche puede combinarse con una persiana de lamas, la cual siempre garantiza un perfecto aislamiento, dejando el estor para las siestas y otros momentos del día.