¿Cuándo vas a comprar tu estor te sientes en la necesidad de elegir entre tener luz o poder gozar de una cierta intimidad en tu hogar? Le sucede a mucha gente ya que los estores demasiado gruesos permiten disfrutar de intimidad en el hogar, pero no dejan pasar la luz durante el día. Sin embargo, los más finos, si dejan pasar la luz, pero cuando se encienden las bombillas al caer la tarde el salón es un escaparate expuesto a cualquier mirada.

Para evitar esto, existen los Estores dobles a medida que se pueden adaptar a todo tipo de ventanas. Estos estores son en realidad dos, cada uno con su sistema enrollable, pero que coinciden perfectamente uno sobre otro en un único mecanismo para que se vean estéticamente bonitos. Durante el día, con el estor traslúcido que está en la parte más cercana a la ventana dejarás pasar la luz del sol pero protegiendo tu casa de la acción directa de sus rayos. Al caer la noche, solo tendrás que bajar el segundo estor , por encima del anterior, y ambos forman una cortina prácticamente opaca que  resguardará la intimidad de tu hogar.

Al ser a medida no importa si tus ventanas no tienen dimensiones estándar o si los quieres para una galería, cubriéndola por completo con estores de diferentes tamaños para conseguir exactamente el juego que quieres con ellos.

Están disponibles en un solo color, pero también en dos tonos combinables. Normalmente, el estor fino en un color más claro y el opaco en un tono más oscuro, consiguiendo así un efecto todavía más resguardado.

Una versión ligeramente diferente de los estores dobles son los estores noche y día. Estos cuentan con dos telas que se manejan a un tiempo, pero que tienen franjas opacas y traslúcidas. Si se hacen coincidir las franjas iguales en ambas telas, la luz pasará. Pero si se cruzan, la cortina se vuelve opaca y no deja pasar la luz.

Este tipo de estor es muy adecuado para el dormitorio donde no queremos que haya en ningún momento una luz muy intensa y nos gusta que tenga siempre cierta intimidad. Los estores dobles, son más adecuados para el salón o para el comedor donde podemos necesitar que el sol luzca en todo su esplendor o no, dependiendo del momento.