Un traslado bienvenido 

Es evidente que estamos ante una crisis económica inaudita porque está afectando muy profundamente a unos determinados sectores, como la hostelería o el turismo, mientras que otros no solo no están en crisis, sino que sus perspectivas están mejorando mucho. Y aunque tampoco se puede generalizar, lo cierto es que el sector tecnológico está en un momento dulce. Es el caso de mi empresa que parece que está superando las expectativas para el próximo ejercicio.

De cara a los trabajadores esto también tiene sus repercusiones. Hace unas semanas me llegaba una noticia que cambia mi futuro, al menos a corto plazo. Debo trasladarme a Singapur durante varios meses junto a un grupo de mi empresa para supervisar la instalación de equipos en una central de uno de nuestros clientes. Se trata de un proyecto en el que yo mismo intervine en su oferta, así que han considerado que debía ser una de las personas de primera línea.

Una de mis labores será la supervisión de la instalación del panel Pc pantalla tactil que se van a usar en la central como eje de la instrumentación para controlar todos los mecanismos de producción. Junto a ello instalaremos una red de sensores conectados a los paneles PC para que gestionen cualquier tipo de incidencia. Se trata de un sistema de elevado valor tecnológico y alto coste pero que ofrece al cliente la máxima seguridad a nivel de producción, pero también de resolución de incidencias técnicas. 

Para mí se trata de un traslado bienvenido que me llega en un buen momento profesional. Será la tercera vez que acuda a obra para supervisar la instalación de este tipo de panel Pc pantalla táctil, y hasta ahora nunca hemos tenido ningún problema con los clientes. Lo cierto es que dejar España durante una temporada, tal como está el panorama, no puede ser para mí más alentador. 

Percibo día a día el hartazgo de la sociedad y yo mismo noto un cierto desánimo. Así que irme durante una temporada bastante lejos puede ser para mí un balón de oxígeno. Espero que, a la vuelta, mi país vuelva a sonreír… y se le pueda distinguir la sonrisa.